A nosotros la pasta nos vuelve locos, y además como vivimos en la frontera con Italia en los supermercados puedes elegir entre tantos tipos que podrías estar comiéndola un año sin repetir y por supuesto sin cansarte de ella!!
Esta receta es un clásico en los restaurantes de diario italianos, pero eso si, cada uno la da un toque diferente. Yo la he preparado a mi gusto y con mi toque personal, como más nos gusta.
INGREDIENTES
500 gr de pasta
Media cebolla
2 ramas de apio
1 zanahoria grande
250 gr de carne picada
2,5 dcl de vino tinto
300 gr de salsa de tomate
Aceite
Queso parmesano
Sal y pimienta
Perejil
Perejil
COMO LO HAGO
En una sartén grande, calentar un poquito de aceite y rehogar la cebolla, el apio y la zanahoria todo pelado y picado pequeñito. Cuando el sofrito esté bien dorado, añadir la carne picada y darlo unas vueltas para que coja bien de gusto durante un par de minutos. A continuación cubrirlo con el vino tinto a fuego alto y dejar que se evapore el alcohol, poner después la salsa de tomate. Dejar que se haga la carne durante unos 15 minutos, a fuego bajo. Salar y pimientar al gusto, pero cuidado porque la salsa de tomate ya lleva sal.
Por otro lado en un puchero con abundante agua salada, cocer la pasta siguiendo escrupulosamente las indicaciones del paquete, mejor dura que pasada!!
Cuando la pasta ya esté cocida, podéis hacer dos cosas, o servirlo como hice yo, encima de la pasta, o podéis versar la pasta a la sartén en la que habéis hecho el sofrito y removerlo. La verdad que de la segunda manera coje más gusto.
Servirlo con queso parmesano ya en el plato o que cada uno se ralle lo que le apetezca.
Adornar con perejil.
